El sector del consumo tendrá que poner el foco en el cliente e impulsar la digitalización tras el coronavirus
El sector del consumo y de la distribución está acelerando su transformación tras la crisis producida por el coronavirus para dar respuesta a las nuevas tendencias, especialmente en torno a los ámbitos que tienen que ver con el conocimiento del cliente (60%) y la optimización de procesos a través de la tecnología para contrarrestar los menores márgenes (27%), según se desprende de las conclusiones del cuarto sondeo del informe 'La empresa española ante la Covid-19', elaborado conjuntamente entre KPMG y CEOE.El sector del consumo y de la distribución está acelerando su transformación tras la crisis producida por el coronavirus para dar respuesta a las nuevas tendencias, especialmente en torno a los ámbitos que tienen que ver con el conocimiento del cliente (60%) y la optimización de procesos a través de la tecnología para contrarrestar los menores márgenes (27%), según se desprende de las conclusiones del cuarto sondeo del informe 'La empresa española ante la Covid-19', elaborado conjuntamente entre KPMG y CEOE.
En concreto, la adaptación a los nuevos cambios en los hábitos de consumo es percibida por el 68% de los encuestados como el principal reto al que se tienen que adaptar en esta nueva realidad, seguido por la digitalización (53%).
De esta forma y para adaptarse a las preferencias del cliente, las empresas del sector consideran que el precio (71%) junto con la seguridad y la salud (68%) serán las dos variables que determinen el consumo tras la pandemia.
El socio responsable del sector Consumo y Distribución de KPMG en España, Enrique Porta, ha subrayado que los efectos que la Covid-19 está teniendo sobre los hábitos de consumo "obligan a las empresas del sector a replantearse su estrategia, que deberá centrarse en profundizar en el conocimiento del cliente y orientar su negocio a satisfacer sus necesidades".
De esta forma, ha afirmado que entre las principales capacidades que las empresas del consumo y distribución deberán potenciar en este periodo está en "ganar flexibilidad y rapidez, transformando la cultura y la organización, impulsando el canal digital y optimizando la cadena de suministro".
Por otro lado, los directivos, tras las dificultades derivadas de la pandemia, son pesimistas a corto plazo. Así, para el 48% de los encuestados la situación actual del sector es negativa y un 40% teme que esta situación se agrave en los próximos meses.
En este sentido, casi uno de cada tres espera recuperar sus niveles de facturación previos en los próximos 12 meses, mientras que un 26% prevé que esto suceda en 2022 y el mismo porcentaje no estima alcanzar esos números hasta después de ese año.
El 57% de los encuestados opina que su facturación disminuirá este año, mientras que el 47% confía en mantener su plantilla sin variaciones durante los próximos 12 meses.
Sin embargo, la mayoría de los encuestados sí está de acuerdo en apostar por el canal 'online' como gran aliado en esta crisis. Si antes del coronavirus para el 91% de los encuestados la venta por Internet suponía menos de un 10% del total, durante el próximo año, el 34% de las respuestas espera situarse por encima de este porcentaje.
Fuente. Europa Press